Motivar a los alumnos y alumnas, promover el estudio y abordaje de la Historia es un desafío en las aulas de Primaria. Los docentes, siempre inquietos y creativos, recurren a diversos recursos con el objetivo de dar sentido al intenso trabajo de un año tan especial como el 2021.
Con motivo del cierre de 6° año, y en torno al proceso pedagógico realizado en Historia, se trabajó de forma interdisciplinaria para la presentación de una obra de teatro: “Años de Vértigo”. Durante el desarrollo y diseño de la obra se abordaron distintos temas que exigen una indagación histórica profunda. Desde el armado del libreto a la musicalización, pasando por el diseño de los personajes y la recreación de la época, hasta la confección de vestuarios y escenografías, cada uno de los aspectos de la obra se contempló en base a los contenidos didácticos.
Con el fin de acercarse a la vida cotidiana de los personajes y su contexto histórico, los estudiantes trabajaron con los libros de texto, así como con literatura relacionada a la temática abordada. Además, visualizaron películas, cortometrajes y asistieron a visitas guiadas a museos y diversos espacios en donde se desarrollaron diferentes hechos históricos. De esta manera, los alumnos y alumnas fueron concretando su objetivo, conocer qué le ocurría al ciudadano común, a los hombres, mujeres y niños protagonistas de esos tiempos, no sólo en relación a su pensamiento sino también a su sentir. Este tipo de instancias, donde los niños pueden conocer la historia a través de hechos cotidianos permiten que se despierten en ellos lazos emocionales con respecto al objeto de estudio y, de esta manera, el vínculo con el mismo se torne más sólido. Es así que no solo les permitió profundizar en la creación de la obra sino que, transversalmente también influye en su formación en el área del conocimiento histórico y social.
La presentación de la obra “Años de vértigo” invita al espectador a que juegue con su imaginación en una dinámica donde debe suponer que desconoce el asesinato del heredero al trono del imperio Austrohúngaro, al gran crack de la bolsa de Nueva York, donde no tiene información alguna sobre la noche de los cristales rotos, ni de Stalingrado, ni de Auschwitz, ni de los gulags, ni Hiroshima, ni del muro de Berlín. La propuesta consiste en que se imagine a sí mismo en los años que van de 1900 a 1989, realizando el esfuerzo de no pensar en las alargadas sombras del futuro que oscurecían ese presente histórico.
Con esta invitación “Años de Vértigo” se presentó en el Colegio donde los alumnos y alumnas pretendieron ser esos ciudadanos históricos, y, con ojos de niños, crear representaciones que reconstruyeran aquellos años de vértigo; tiempos marcados por fascinaciones y temores, por luces y sombras…
El gran desafío en una clase de Historia es despertar la empatía, así como un sin número de preguntas, cuestionamientos y emociones, es pensarse en otros tiempos, es conocerse y reconocerse como actores sociales herederos y constructores del devenir de estos agitados tiempos en que les toca vivir.